martes, 17 de agosto de 2010

Para trabajar conectores, nada mejor que...


¡Conectarse!
No sólo con los textos sino con otras entradas de este mismo blog. Los invito a transitar nuestra entrada del sábado 5 de septiembre de 2009.
¡A trabajar!
Luego, charlamos en clase.





Y hablando de conexiones, este cuadro se llama "Maternidad" y es del pintor ecuatoriano Oswaldo Guayasamín.

martes, 10 de agosto de 2010

Textos que enlazan textos...


Y vamos trabajando la lectura, el análisis como escritores, la mirada atenta a la palabra del otro.
Por eso, a partir del texto de Martín, cada uno de ustedes ha escrito otro texto que se convierte en eco del primero: en primer lugar, resaltando un pasaje del mismo, luego, ampliándolo, enfrentándolo, alabándolo. Viviéndolo, como lo es toda verdadera lectura.



A continuación, los escritores
.

..."ponerse la camiseta de un país que vive alimentándose de fútbol apasionadamente y salir a la cancha a conquistar ese sueño increíble y, quizás, el sueño más hermoso que tiene todo jugador: ser campeón del mundo..."
Esta frase la destaco porque en este país que es tercermundista, solo la pasión al fútbol puede generar tantas alegrias. Y no es el sueño de todo jugador profesional sino que también es el sueño de todo pibe. De niño uno nace queriendo ganar jugando ese deporte tan lindo que mueve multitudes.

Adan Guerrero.


“Para cumplir el sueño que le faltaba” … a él, pero también al futbolista amateur que por su sentimiento se ve reflejado en el espíritu de Palermo que a los 36 años mantiene la pasión del futbolista de potrero, sin contrato, sólo empujado por su romance con la pelota: el único y verdadero motor del futbolista.

Marcelo Álvarez

“Me sentía grande y orgulloso por ser parte de mi nación”. Al ver a la selección y ver a Martin Palermo entrando en el segundo tiempo, y marcando ese maravilloso gol que se puede apreciar no tanto por lo futbolístico, si no por lo emotivo. Si el mundo se terminara hoy, el moriría tranquilo. Un grande, un guerrero de batallas ganadas y perdidas, otra vez se vuelve a encontrar con la pelota.

Siempre estás ahí Martin, otra vez dando alegría al pueblo argentino.

Bruno Claverías

Es una excelente observación la que Martín Casco hace, refiriéndose a Palermo, cuando expresa: "...para cumplir el sueño que le faltaba...". Logró comprender la importancia de no olvidar los sueños, de desearlos como la primera vez y de saber esperar porque en el momento menos previsible -como fue el hecho de un "rebote”- el sueño se cumple. Ese sueño es consecuencia de no haber abandonado nunca el trabajo sobre uno mismo, de sortear dificultades hasta el último momento.

Esta es la importancia de lo que el fútbol representa: no es sólo un juego, se puede tomar como una representación de la vida misma, con alegrías, desilusiones, aciertos, errores, pero siempre con la posibilidad de que exista una revancha, un campeonato nuevo para autocorregirse, para superarse.

Julio César Anahue


"¡Allí entró, faltando solo diez minutos! Primero, para cumplir el sueño que le faltaba, el de sentirse un jugador pleno jugando una copa del mundo y, en segundo lugar, para demostrarse y demostrarle a la gente que merece estar ahí por su esfuerzo y, también, por lo que es más importante en esto que se llama fútbol: tener condiciones y tener sed de revancha".

Esta frase es muy buena ya que describe el sueño que tenía Martin Palermo y el sueño que tenían de ver los argentinos al mejor goleador jugando una copa del mundo, todos esperamos ese momento. Diego lo cumplió para nosotros, felices ese día con el gol más esperado.

Melina Pinedo

"Estaba tranquilo hasta ese momento, ya estábamos clasificados y ganando por un gol pero sabía, intuía o preveía que algo mucho más trascendental iba a suceder, algo que quizá no sería tan grande para el mundo pero si para nosotros, los argentinos."

Esta frase me da a entender que él esperaba algo más. ¡Algo mucho más grande, más especial y más emocionante!

Creo que esperaba alguna especie de milagro porque hablaba de algo trascendental pero no necesariamente tenía saberlo el mundo, sino que nos pertenezca como argentinos, que sea nuestro y de nadie más... él lo esperaba, lo intuía y lo preveía y por suerte se dio, por suerte la magia de una vez por todas... ¡Salió!

Martín Casco

"la mandó a guardar quedando en la historia con su boca llena de gol". Pero a la vez dejando salir todo lo que él tenía dentro. Todo ese esfuerzo y sacrificio que lo llevó a estar en ese momento, rodeado de tantas personas coreando su nombre, y abrazándolo a pesar de la distancia, cumpliendo su sueño y los sueños de muchos argentinos. Dedicándoselo a todo aquel que en la vida de Martin contribuyó a que todos estos sucesos fuesen realidad.

“Llenando su boca de gol”, qué frase tan significativa, qué frase que encierra dentro de sí tantos significados, que logra contener el misterio de todo lo que siente el pueblo argentino.

¿Cómo evitar no identificarse con esta historia, cómo no emocionarse, cómo no haberlo alentado, cómo no haber gritado ese gol? Llenarse uno mismo también la boca de ese grito tan lleno de sentimientos, de anhelos, sueños, y esfuerzos. ¿Cómo no sentirse no representado con este relato?, si estamos hablando de un ejemplo; lo admito, quizás él no sea un médico, quizás no salvó la vida a nadie, ni terminó con la pobreza, lo sé, lo sabemos todos. Pero cómo no idolatrarlo si es el ejemplo más claro de que uno puede perseguir su sueño y concretarlo; que puede dar todo de sí, a pesar de todos los obstáculos que se nos pueden presentar en la vida. Un sueño es eso, es un sueño. Jamás hay que dejarlo ir, jamás hay que bajar los brazos. Ésta es una enseñanza que pudimos ver reflejada en la vida de este ser. Y que termina provocando la admiración de todo par que sepa de su historia.


Guido Dodera